Un sitio para ver películas comerciales y no tanto. Entre tantas, emerge La verdad oculta, otra mirada sobre la guerra de Bosnia.
Por Santiago Asorey
De las páginas de Internet dedicadas al visionado online de películas gratis, Gnula tiene la particularidad de tener una interfaz bastante accesible y sencilla. Algo fundamental para los usuarios. Gnula no solamente ofrece ver películas online sino también descargarlas y cada película está complementada con sinopsis, trailers e imágenes que ayudan como guía para quienes navegan y necesitan información para el criterio de selección. La página contiene desde estrenos hasta películas un poco más antiguas y algunos clásicos. También se incluye una sección con una detallada clasificación más temática que genérica. En donde se destacan clasificaciones curiosas de películas como cine jurídico, docencia, racismo o literatura. Originalmente la página nació como un blog que fue cerrado, pero el mismo espíritu continúa en la página.
En esta ocasión la recomendación para ver online es “La verdad oculta” (The Whistleblower es el titulo original en ingles; se mirá acá). La película está basada en el relato testimonial de Katherine Bolkovac. Una policía norteamericana y madre soltera enviada a Bosnia, Sarajevo, como representante de la ONU para ser parte del ejército de paz encargado de estabilizar la región. Kathy es puesta a cargo de la investigación de crímenes de violencia de género. A través de un montaje alterno paralelo se funden las historias de Rayisa y Kathy. Rayisa es una adolescente victima del tráfico sexual que es sometida a situaciones de esclavitud y tortura en la ciudad de Sarajevo. Kathy se compenetra en la historia de Rayisa y otras chicas víctimas de explotación e intenta ayudarlas. Su investigación la lleva a descubrir que la ONU, organización a la que ella representa, está involucrada en el negocio millonario del tráfico de personas, dando apoyo logístico a los traficantes locales, ofreciendo demanda e interiorizándose en el mismo negocio.
El relato pone a disposición una denuncia devastadora sobre como diplomáticos, funcionarios de la ONU, efectivos de la policía internacional, miembros de la OTAN y del ejercito norteamericano estaban fuertemente involucrados en el trafico de mujeres para su explotación sexual en Bosnia en los noventa. El problema está en el enfoque político de la concepción clásica del relato, en donde el montaje pone el énfasis en lo individual. En este caso, en particular en la corrupción y la perversión en lo individual. Como dice Deleuze refiriéndose a Griffith: no hay ley de “génesis”, no hay explicación de cómo estas partes diferenciadas de individuos son originadas por una estructura social que las determina o condiciona por su lugar de dominación. Se hace hincapié en las decisiones morales de los personajes desde la perversión o desde la bondad, pero no se muestra que el tráfico de mujeres del cual la ONU y la OTAN participaron no es una discontinuidad en su política dada a nivel de individuos. Sino la base misma de su política oculta que es disfrazada por un discurso de legitimación del “derecho” de intervención política y militar de las grandes potencias sobre los países subdesarrollados. Siendo éste en realidad el “derecho” de explotación de las grandes corporaciones que utilizan el modelo de la guerra “privada”, financiada por el Estado norteamericano pero ejecutada por privados, (Halliburton, Blackwater, DynCorp, Pinkerton) para explotar la mercantilización de los conflictos y acrecentar las relaciones de dominio imperial.
agencia paco urondo